Perfil

La creación espontánea de Liliana Livneh provoca una atracción hipnótica. 
Algo se está por descubrir, algo se está por revelar. 
El arte no es lo que se ve, es la libertad de intuir lo que propone: la pintura alcanza algo inefable al igual que la poesía o la música. 

A través del acto creativo, femenino y sensual, el trazo curvilíneo queda asociado a la carnalidad; lo vivo que emana supera la racionalidad. Liliana alcanza algo muy difícil de lograr en arte. 

Se trata del “significante cero”: aquello que ya ocurrió o está por ocurrir. 
El movimiento libre que plasma su mano pintando y escribiendo, replica en la imaginación. El cuerpo siente. Darle sentido a lo que vemos nos convierte en artistas de la contemplación. Su obra puede interpretarse también, como recortes anímicos que suceden en el día. El color lucha por emerger con su luz, ante la preponderancia de los grises. 
Así son los diferentes momentos de interioridad: puede alcanzar la felicidad o una felicidad amenazada. Liliana se vale del triángulo como campo de creación. Una forma que simboliza la armonía y la proporción. 

La superficie se cubre de momentos biográficos que contienen alquímicamente el símbolo del fuego y del corazón. 

La obra de Liliana Livneh nace del amor. Allí están los recuerdos de su niñez en Mar del Plata. La sorpresa por encontrar una piedra en forma de corazón y la emoción por las lecturas de Alejandra Pizarnik y Julio Cortázar. 
Pero también en su estructura compositiva interviene el rectángulo. Una figura ligada a la sección aura porque simboliza la unión entre el cielo y la tierra. Una actitud cotidiana, como cuando sube a su terraza a disfrutar del cielo y las estrellas. 

Julio Sapollnik
Lic. en Historia de las Artes,
U.B.A.Master en Cultura Argentina.

 

Rayuela se abre, se entrega, se lee y se relee, es un libro que se lleva puesto y que a pesar de que transcurre en una época definida es atemporal, es argentino y a la vez universal. Pinto cariátides que pueden se pilares frágiles y con la misma fragilidad del aire ser fuertes guardianas de la poesía con las que dialogo incluyendo en mi obra grafismos y caligrafía que no siempre son legibles por ser estos de valor puramente estético intrínseco. Lenguaje de orden y caos, de contrastes , de luz y de sombra de trazos gestuales como la pintura .

Rayuela es para mi una poesía escrita en prosa que invita a la imaginería y crea un universo de sugerencias haciendo que esta única y maravillosa obra de arte se reproduzca y se multiplique en otros soportes como el lienzo , el papel, la baldosa , para tramar una poesía hermética en transe de transparentarse a través de quien escucha su voz . 

Liliana Livneh 


En uno de sus catálogos ( New York) la artista escribe :
“Al fin y al cabo soy una lectora.
Es este placer de comerme las palabras con ojos y dedos, mezclando cuerpo y alma como siempre.”

Obras inspiradas en Rayuela Muestra Itinerante 

Feria Internacional del Libro Jerusalen 
Instituto Cervantes Tel Aviv
Instalación Coloquio Internacional Cortazar, Universidad Hebrea Jerusalen 2014

Arcimboldo “Leyendo a Cortazar “
Nueva obra de 2024